Bundt Cake de Cacao o The darkest chocolate cake ever

Últimamente veo por muchos blog de cocina los famosos bundt cake. En verdad para mí no tenían nada de especial excepto los moldes tan bonitos que se usan. De hecho, tenía un molde en casa que ni si quiera había estrenado, pero que no me terminaba de convencer.

Son de esas recetas que piensas que se les dan mucho bombo porque quedan muy vistosas pero que en nada se diferencian del bizcocho que haces en casa. Hasta que me dio un día por probarlo. Que equivocación más grande la mía pensar que eran iguales que los bizcochos típicos de yogur. No se parecen ni en el blanco de los ojos (si los tuviesen).

No solo no se parecen en ingredientes, ya que los bundt cake suelen llevar grandes cantidades de mantequilla además del buttermilk (que es algo así como leche cortada con limón), si no en el olor, sabor y aspecto. El bundt cake es terciopelo puro en la boca, se deshace solo con casi mirarlo y el sabor tan suave y delicado como algodón de azúcar. Os aseguro que no es ninguna exageración lo que os cuento, y de hecho aviso a navegantes, no será el último.

Para empezar, como gran amante que soy del cacao, vamos con uno que hizo hace tiempo Bea de El rincón de Bea, donde tiene una gran cantidad de recetas de bundts donde puedes escoger la que más te guste. Muchas gracias por enseñarnos el mundo tan maravilloso de los bundt cakes y su historia. Vamos a ver que necesitamos.

INGREDIENTES: para un molde bundt de 25 cm.

• 250 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
• 4 huevos talla L a temperatura ambiente
• 350 gr de harina normal
• 360 gr de azúcar blanco
• 240 ml de buttermilk *
• 1 cucharada pequeña de bicarbonato
• 1/4 cucharadita de sal
• 150 ml de agua hirviendo
• 60 gr de cacao (yo usé sin azúcar puro de Valor)
• 2 cucharadas pequeñas de aroma de vainilla (o almendra)

PREPARACIÓN:

1. Comenzamos encendiendo el horno a 170ºC y cociendo el agua hasta que rompa a hervir, momento en el que lo apartamos del fuego y añadimos el cacao hasta conseguir una pasta suave, sin grumos. Dejamos que se temple.
2. Después engrasamos con mantequilla el molde (o spray para desmoldar) y mezclamos y tamizamos la harina con la sal y el bicarbonato. Reservamos para después.
3. Batimos de manera enérgica la mantequilla con el azúcar hasta conseguir que blanquee y quede esponjosa. Añadimos entonces los huevos batidos de uno en uno a poca velocidad y no sin antes estar bien integrado los anteriores.
4. En ese momento, añadimos 1/3 de la harina y mezclamos. Después agregamos la mitad del buttermilk. Volvemos a agregar 1/3 de harina y volvemos a batir. Terminamos el buttermilk y acabamos por último con lo que nos quede de harina hasta que quede una masa suave y esponjosa.
5. Por último agregamos la esencia y el cacao y mezclamos a mano hasta conseguir que toda la masa quede del mismo color uniforme. Echamos la mezcla en el molde bundt con cuidado para que entre bien en todas partes y lo introducimos al horno de 50 a 60 minutos.
6. Para comprobar que está bien hecho introduce una brocheta hasta el fondo y que salga limpia. Piensa que al ser chocolate puede darte la sensación de que esta hecho pero luego el interior estar crudo.
7. Deja que se enfríe un poco y coloca el molde boca abajo para desmoldar con mucho cuidado.
8. Ya está listo para disfrutarlo!

*Buttermilk: si no lo encuentras en el super, añade a  240 ml de leche entera una cucharada sopera de limón y deja que repose 10 minutos. Así conseguimos que a la leche le salgan grumos, como si se hubiese cortado, no te preocupes que es así!.

Bueno, pues con este bundt cake ya puedo decir que soy una fan declarada. Estoy deseando probar más sabores y recetas distintas.

¿Qué os ha parecido a vosotros? 

Nos vemos mañana de nuevo!

Un beso a todos.