20.11.12

Gachas dulces

Este es un plato tradicional que suele hacer mi suegra en su casa de vez en cuando, y que a parte de ser muy sencillo, es bastante rápido y no requiere tener ingredientes especiales para su elaboración. Por lo que me ha contado, hace años esta receta se hacía para los niños como sustitución de las papillas de frutas, porque no se disponía de tantos recursos como hoy.
Gachas dulces
Gachas dulces
Eso si, las cantidades son a ojo, porque como lleva muchos años haciéndolas y ya sabe más o menos lo que tiene que echar de cada cosa, por lo que depende de la cantidad que quieras hacer. A mi me recuerda mucho a la bechamel solo que dulce, así que vamos a ver como se hace.

INGREDIENTES:

  • Aceite de oliva suave
  • Harina
  • Leche
  • Azúcar
  • Pan del día anterior (vale también del día)
PREPARACIÓN:

  1.  En una cacerola ancha, añadimos aceite suficiente para cubrir toda la superficie (la proporción es de más aceite que de harina para que quede lisa y sin grumos). Ponemos el fuego fuerte, y cuando comprobemos que el aceite está caliente (pero que no llegue a humear) bajamos el fuego y añadimos unas 3 o 4 cucharadas soperas de harina. Removemos con una cuchara de madera, hasta que esté todo bien integrado. Debe quedar una "especie" de masa de color amarillo verdoso sin grumos. Debemos tener cuidado de que la harina no se queme, porque si no el sabor es horroroso.
  2. Una vez que hemos conseguido no tener grumos, vamos añadiendo la leche poco a poco, y vamos removiendo con la cuchara despacio a fuego medio-bajo, para que no se pegue. La consistencia de las gachas es más espesa que la de la bechamel, por lo que no añadas más leche si no se ha conseguido absorber la que había antes.
  3. En el momento en que hayamos conseguido esa masa espesa sin grumos, es el momento de añadir el azúcar, más o menos la misma cantidad que de harina, unas 3 o 4 cucharadas soperas. Si prefieres ir comprobando su sabor a medida que añades las cucharadas de azúcar, conseguirás el dulzor que más te guste. Ten cuidado con no dejar demasiado tiempo al fuego, porque pueden espesarse mucho y quedar muy sólidas.
  4. Colocamos las gachas en una fuente y mientras en una sartén pequeña, ponemos bastante aceite y cortamos las rebanadas de pan en cuadrados. Cuando esté caliente los agregamos, dejamos que se doren y los vamos colocando sobre un papel absorbente. Por último los colocamos sobre las gachas y dejamos que se terminen de enfriar. Ya están listas para comer.


Gachas dulces

3 comentarios:

  1. Pues sí que es de lo más apañado, Marta. Para mí está entre una bechamel dulce y la base de la leche frita, no te parece?
    Un besazo.

    ResponderEliminar
  2. Es de lo más apañado, sin duda, y la verdad es que no lo había pensado, pero si, tiene un poco de ambos. Un besazo!!

    ResponderEliminar
  3. Con postres asi merece darse de vez en cuando un capricho porque solo se vive una vez y estas gachas piden a gritos ser comidas jajaja.

    ResponderEliminar

Muchas gracias por tus palabras, me hace mucha ilusión leeros.