Muy buenos días a todos, ya estoy de vuelta!! Menudas ganas tenía de regresar aquí y poder estar de nuevo con todos vosotros compartiendo lo que más nos gusta, la cocina.
Se que en verano cocinar en el horno a veces es un poco "agobiante", pero la verdad es que no puedo estar sin el, de hecho, donde he estado de vacaciones, que es en mi pueblo con mi abuela, no tenía horno, y aunque para cocinar no es imprescindible si que notaba que me faltaba una parte importante en la cocina.
Así que en cuanto he llegado a Madrid, lo primero que hice fue encender el horno, y hacer estas ricas galletas con copos de avena, que había visto por la red hace bastante tiempo.
Por norma general, la avena no es uno de los productos que más me guste comer, no está mala, pero no me hace gracia. Pero, por "problemas" de salud, me han obligado a que introduzca en mi dieta la avena para evitar así las hipoglucemias que vengo sufriendo desde hace tiempo. Como sabéis, la avena al ser un cereal, hace que se digiera más despacio en el estómago y así mantienes unos niveles de glucosa estable en sangre. Así que, dicho y hecho. Y os añado que
no son las típicas galletas incomestibles con sabor a cartón, éstas son una de las mejores que he probado, dulces sin empalagar, y con un sabor que las hace diferentes. Así que, sin enrollarme más, vamos a ver que necesitamos.